Los 7 principios del aprendizaje

En el post anterior repasamos algunos de los fundamentos del aprendizaje definidos en el marco de una investigación de la OCDE. En su análisis también se recogen los llamados “7 principios del aprendizaje“, una serie de normas que facilitan la adquisición de conocimientos y habilidades, y que revisten especial relevancia para el trabajo de cualquier profesional dedicado al mundo de la educación, pues nos ayudarán a diseñar propicios ambientes de aprendizaje. Son los siguientes:
1. Los aprendices al centro.
Los estudiantes deben ser los protagonistas de su proceso de aprendizaje. El ambiente debe proveer a estos de un carácter autoconsciente del proceso, de sus objetivos y de su rol activo y participativo en el mismo. El papel del profesor es secundario; éste tiene que convertirse en un guía u orientador, facilitando la adquisición de competencias a sus aprendices.
2. La naturaleza social del aprendizaje.
La interacción social entre estudiantes enriquece el proceso de aprendizaje, dotando de nuevos puntos de vista, perspectivas y experiencias. Es por ello que se recomienda realizar trabajos en grupos cooperativos, organizados y estructurados, para potenciar los talentos de cada estudiante y desarrollar una simbiosis entre sus respectivas destrezas.
3. La importancia de las emociones.
El aprendizaje resulta de la relación dinámica entre emociones, motivación y cognición. En la medida que nuestros diseños se centren en dichos factores, con un enfoque social, facilitaremos la adquisición de competencias.
4. Hay que reconocer las diferencias individuales.
Es necesario adaptar los ambientes de aprendizaje apara reflejar las diferencias individuales o grupales de los estudiantes. Los conocimientos, habilidades, intereses, motivaciones y experiencias de cada estudiante son muy distintos, por lo que el proceso cognitivo puede variar de una persona a otra.
5. Incluir a todos los estudiantes.
Un buen ambiente de aprendizaje debe diseñar programas que conlleven trabajo arduo y retos, pero sin caer en una sobrecarga. Ser sensible a las diferencias y necesidades individuales también significa poner desafíos por encima del nivel y capacidad existentes, pero nadie debe quedarse atrás por mucho tiempo. Para ello, una buena táctica es que los estudiantes con mejores resultados ayuden a los que están más abajo.
6. Evaluación para el aprendizaje.
El ambiente de aprendizaje debe clarificar qué se espera de los estudiantes, aportando retroalimentación continua y relevante de forma individual. En caso contrario, la motivación puede disminuir y con ella la probabilidad de lograr la auto-regulación.
7. Construir conexiones horizontales.
Un rasgo fundamental del aprendizaje es que las estructuras de conocimiento complejo se construyen a partir de piezas más básicas de conocimiento y de modo jerárquico. Si están bien construidas, estas estructuras proporcionan un conocimiento que puede transferirse a situaciones nuevas, lo que constituye una competencia crítica del siglo XXI.
Otros autores postulan principios de aprendizaje alternativos a los planteados por el estudio de la OCDE, pero personalmente creo que los mencionados son mucho más clarificadores y adaptables desde el punto de vista de la formación online. Espero que estos 7 principios os sean de utilidad a la hora de organizar clases, diseño curricular o diseño instruccional.
